Diagrama lunar: una herramienta de autoconocimiento

El diagrama lunar es una herramienta con la que accedo a una información muy valiosa sobre mi misma y con la que, al pasar los meses, empecé a usar a mi favor.
Escrita el 8 de mayo de 2021
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La primera vez que conocí el diagrama lunar fue en 2017. Una amiga me regaló un diagrama lunar de bolsillo y me contó un poco para qué servía y cómo a ella le estaba funcionando registrar su ciclo menstrual.

Cuando a principios de 2013 decidí dejar de tomar pastillas anticonceptivas, después de más de 10 años de tomarlas, empecé a relacionarme con mi ciclo menstrual y sus variaciones. Tengo, lo que comúnmente se dice, un ciclo irregular.

Si bien mi ginecóloga me explicó que ya se está dejando de usar eso de clasificar al periodo regular solo al que dura 28 días y ampliar un poco más los tiempos, igualmente tengo un ciclo irregular: un mes el ciclo dura 30 días, al otro dura 25 días, al otro dura 40 días, al otro 15 días.

Desde siempre registro mis periodos menstruales. Clásico, la fecha en que empieza y cuando se retira. Pero el diagrama lunar llegó como una herramienta con la que accedí a una información muy valiosa y con la que, al pasar los meses, empecé a usar a mi favor.

Qué es el diagrama lunar

El diagrama lunar es un ejercicio que te permite conocerte a vos misma, conectar con tus estados de ánimos, emociones, pensamientos, tu cuerpo y sus estados. De esta forma, podés conocer los cambios que vas experimentando a lo largo de los ciclos menstruales y ver los patrones que se repiten (más adelante te cuento por qué esto es algo maravilloso).

Por lo general, el diagrama lunar es un circulo que se divide en 28 partes y en el que se registra, la fecha del calendario, el día del ciclo y el ciclo de la luna. Esta es la forma básica. Después conocí otros que incluían espacios para dibujar o escribir sobre el estado de ánimo, físico, sexual, mental, espiritual. 

El primer diagrama lunar tenía como finalidad colorear la menstruación y dibujar la fase lunar para que, de esta forma, pueda observar el sangrado y su relación con las lunas. 

Relación entre las fases lunares y el ciclo menstrual

En el diagrama lunar de bolsillo había una página que explicaba la relación entre las fases lunares y el ciclo menstrual.

Luna nueva: Sabiduría, transformación interior. Oscuridad, introspección. Energías psíquicas. Desprenderse, estar en silencio, receptivas. Momento de iniciar. Sembramos.

Luna creciente: “Lo virgen”. Receptivas a nuevas experiencias con alegría y entusiasmo. Se manifiestan las energías sentidas en la luna nueva. Es tiempo de acción, de encarar nuevos proyectos, de ponerse en movimiento. Gran poder de concentración. Energía radiante. Brota la semilla.

Luna llena: Espejo. Refleja la luz del sol y es momento de plenitud. Madre, la que alimenta, la que sustenta. Mujer protectora capaz de asumir responsabilidades. Aumento de sensibilidad, necesidad de conexión con la naturaleza. Energías en punto máximo. Florece la semilla.

Luna menguante: Comenzamos a redirigir la energía de nuevo a nuestro interior. Purificando, relajandonos y compartiendo todo aquello que hemos interiorizado. Tiempo de centrarnos, de soltar para dar espacio a lo nuevo y experimentar la energía sexual en libertad. Se recogen los frutos.

La luna roja y la luna blanca

Vuelvo un poco más atrás, al 2016, y recuerdo que cuando estaba en Brasil, hubo unas semanas que conviví con Camila (otra viajera) y que cuando le comenté que estaba menstruando me dijo “sos luna roja porque menstruas en luna llena”. Y como era de esperarse, mi eterna aprendiz ya estaba buscando en Google que significaba eso.

Así conocí el libro “Luna roja” de Miranda Gray. En ese momento no lo pude leer así que me contente con unos resúmenes que encontré en blogs y con una de las imágenes del libro.

Ciclo de la luna según Miranda Gray en su libro «Luna Roja».

En su libro, Miranda Gray divide el ciclo menstrual en dos ciclos: Luna blanca (menstruar en luna nueva) o Luna roja (menstruar en luna llena). El ciclo de la luna blanca facilita a la mujer dirigir sus energías hacia la procreación, generando nuevas vidas en el clan. El ciclo de la luna roja facilita a la mujer dirigir sus energías hacia el conocimiento interior y la espiritualidad.

«Debemos tomar conciencia de que la vida menstrual es la expresión de un ser de naturaleza cíclica.
Eres mujer y tu fuerza radica en el hecho de que no eres constante, pues el ritmo del cambio es el ritmo del universo.
Cuando tus energías dejen de ser lineales y se conviertan en cícclicas, seguirán un ritmo que se repetirá una vez al mes, y el color y el sabor de tus ritmos serán solo tuyos.
Resultará posible la comprensión del vínculo de la mujer con el universo cuando las mujeres lo experimenten directamente a través de sus cuerpos.
Si una mujer consigue aprender a comprender su ciclo, aceptar los cambios que acarrea y ser fiel a su propia naturaleza, podrá recuperar su equilibrio.»

*Fragmentos extraídos del libro Luna Roja de Miranda Gray.

Mi versión del diagrama lunar

Cuando supe que podía registrar más que las fechas de mis ciclos menstruales y las fases de la luna, me puse a buscar en Pinterest y luego a dibujar uno que me había gustado. Era con la misma circular que el otro y tenía un índice con símbolos que se utilizaban para registrar los diferentes aspectos personales.

No pasó ni una semana que me di cuenta que el formato no me servía. Que necesitaba más espacio para poder escribir. Que poner solo un símbolo para describir mi estado de ánimo, mi estado físico o mental, me quedaba corto. Entendía qué significaba diagrama pero yo necesitaba otra cosa. 

Así que agarré un cuaderno de hojas blancas que tenía guardado y, en vez de hacer un circulo, dibujé en las hojas un cuadro de doble: las columnas con los aspectos que quiero registrar y en las filas los espacios para escribir.

¿Qué registro en mi «diagrama» lunar?

En la primera columna coloco la fecha de ciclo menstrual y en la segunda columna, la fecha del calendario. ¿Por qué así? No hay una explicación. Lo hice así desde un principio y me acostumbré. Todos los meses digo que voy a cambiarlo y me olvido. ¿Debería ser al revés? Depende de vos. El diagrama lunar es una herramienta personal.

Luego agrego información sobre la fase de la luna y al lado sobre el signo en el que está la luna. ¿Y esto por qué así? Al principio fue porque para rellenar sobre las fases lunares me descargué la aplicación móvil “Fases de la Luna” (tengo Android, pero seguro hay para iOS) y en la app está el dato del signo. Cuando en el 2020 empecé a estudiar sobre Astrología, entendí que en ese dato podía encontrar más información y hasta diferentes patrones de conducta y ánimo. 

Básicamente cada signo tiene asignado un elemento de la naturaleza: fuego, tierra, aire y agua. A su vez, cada signo tiene asignada una personalidad arquetípica. Revisando ciclos anteriores logré identificar que los días donde la luna está en un signo de agua, son días en los que suelo estar más sensible, más introspectiva. Los que tienen luna en escorpio son días muy profundos y oscuros (pero no en el mal sentido de la palabra). Los días de lunas en aire son días en los que mi creatividad está excitada (sí, así de extrema). En fin, esto es algo que a mi me suma y me sirve.

Luego vienen tres columnas en las que registro: cómo me sentí físicamente, emocionalmente y mental y espiritualmente.

En la columna sobre “físico” escribo sobre como me siento respecto a la energía, ganas de hacer cosas, dolores, ansiedad, necesidad de siestas, calidad del sueño, entrenamiento y ejercicio físico, momentos de meditación, medicamentos que tuve que tomar.

En la parte “emociones” escribo sobre cómo me sentí emocionalmente durante el día. Ya sea que estuve muy sensible, si estuve fastidiosa o enojada. Si lloré, si me sentí estable. Si perdí el control en alguna reacción. Si sentí angustia.

“Mental y espiritual” están juntos por un tema de espacio por el tamaño de la hoja. A veces pienso que cada ítem necesita su columna y hay otros días en los que dudo de seguir registrando sobre “espiritual” porque no sé qué escribir. Y obvio, ese pensamiento lo registro porque significa algo. Y respecto a lo mental… mi mente no para un segundo. Así que intento escribir sobre los pensamientos que más llamaron mi atención. Hay días que pongo “sobrecarga mental” y significa que me agoté solo de pensar en diez mil cosas al mismo tiempo. 

El poder del diagrama lunar

Como comenté más arriba, con el correr de los meses empecé a ver patrones en cuanto a las fechas de los ciclos lunares. Como tengo un ciclo irregular no es que todos mis ciclos comienzan con una misma fase lunar. Sí, por ejemplo, se que comienzan cuando empieza un ciclo lunar. Es decir, muy rara vez el ciclo comienza si la luna está a mitad del ciclo entre menguante y nueva. Por el contrario, un día antes, el mismo día o el día después del comienzo de un ciclo suele aparecer el sangrado.

¿Qué más identifiqué? Los momentos del ciclo en que tengo más energía y fuerza de voluntad para hacer cosas. Entonces uso esta información a mi favor y esos días los utilizo para hacer más ejercicio físico o para comenzar algo nuevo o retomar algo trabado. También identifiqué que con la luna llena, suelo tener dos o tres días de despertarme durante la noche o dormir poco. Y, al revés, con la luna nueva, necesito dormir más entonces me despierto más tarde o duermo siestas más largas (de hasta dos o tres horas).

¿Cómo uso eso a mi favor? Porque al conocer cómo transcurren los ciclos de mi cuerpo en los diferentes días, practico la aceptación y compasión. No me fuerzo a hacer cosas. Si se que es un día en el que haré las cosas de forma automática y que mi mente estará más dispersa, esos días no me planteo hacer cosas creativas. Más bien me dejo llevar. Pinto un mandala, escribo por escribir, escucho música que me relaje o sonidos ambientales de naturaleza.

Mi próximo paso y que empecé a registrar hace poco es el de los momentos del día. Si bien tengo muy claro que las mañanas son el mejor momento para mi creatividad y conectarme conmigo misma. También encontré otros momentos del día para hacer determinadas actividades. Y así elijo cómo utilizar mi energía. Por ejemplo, por la mañana estoy más inspirada y conectada, entonces la mayoría de los días (porque hay veces que no se puede) uso esas horas para escribir, para crear y pensar nuevas ideas y dejo para la tarde las tareas más automáticas o que me causan agobio. 

También logré armar una lista de cosas que son como cargadores de energía porque son aquellas que le dan belleza a mi vida. Y me propuse intentar que todos los días haya la mayor cantidad de esas cosas, personas y situaciones que me hacen sentir bien. Es normal que cuando me pasé muchas horas en la computadora, luego necesite ir a regar mis plantas o cocinar algo rico. Y cuando me angustio y lloro mucho, necesito un abrazo, dormir una siesta, escribir.

Cuanto más te conozcas a vos misma, mejor será la relación que lleves con vos. Suena medio enroscado lo que escribí. Voy a buscar otra forma de decirlo. Cuando vos lográs entender por qué pensás de determinada forma, por qué te sentís así o asá, por qué necesitás hacer tal o cual cosa, tenés en tus manos una información valiosa. Porque ya no te vas a enojar con vos misma porque no entendés por qué no te sale tal cosa o no tenés ganar de hacer tal otra. Vas a entender, comprenderte y tratarte con compasión y amor. 

Espero que mi experiencia con el diagrama lunar te motive a hacer el tuyo y registrar tu día a día para conocerte a vos misma y entenderte. Y sobre todo, a tratarte bien. Me encantaría que me dejes un comentario sobre lo que te pareció este post sobre el diagrama lunar.

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