El autoconocimiento es el ejercicio de reflexionar sobre una misma. Es un proceso reflexivo, es decir, no es algo que se da de la noche a la mañana. En el proceso de conocerse a una misma (o a uno mismo) vamos adquiriendo información, conocimiento sobre nuestro pensamientos, emociones, acciones, nuestras cualidades, habilidades, valores, nuestras debilidades, defectos y nuestros deseos. También nos ayuda a conocer nuestro contexto, cuáles son nuestros problemas y de qué forma podemos solucionarlos.
El autoconocimiento es la clave del desarrollo personal.
Autoconocerse no significa saber y tener presente los recuerdos de nuestro pasado y lo que nos caracteriza como personas. El autoconocimiento es más profundo. Es un estado de profunda reflexión y autoaceptación.
Uno de los motivos por los cuales no nos conozcamos a nosotras mismas es porque trabajamos más en adaptarnos a quienes nos rodean, a las necesidades y deseos de las personas que nos rodean. De esa manera, solemos esconder nuestros verdaderos deseos, nuestras intenciones, lo que nos gustaría hacer o lo que no nos gustaría hacer.
Síntomas de que necesitás conocerte a vos misma/mismo
1 – Te cuesta responder a la pregunta ¿quién soy?
Es la pregunta más importante del autoconocimiento.
Si te piden que te describas, ¿cómo lo hacés? ¿Decís tu profesión? ¿Decís el rol más importante que haces? Por ejemplo: soy mamá, soy abogada, soy la hija de, soy empleada en un comercio, etc.
2 – Te describís a partir de lo que otras personas te dijeron quién sos.
Y en este caso, es normal decir frases como: “Soy tal cosa porque así me decía mi mamá/papá cuando era chica” o “Siempre me dijeron que era así”.
3 – No sabes bien que te gusta
¿Qué disfrutás hacer? ¿Cuál o cuáles son tus pasiones? ¿Qué cosas hacés y que se pasa el tiempo sin que te des cuenta? ¿Esas actividades que disfrutas son parte de tu día a día?
4 – No entendés tus emociones y perdés el control
Y acá no estoy hablando de que te controlás de no enojarte cuando es válida la emoción. Estoy hablando de cuándo no entendés por qué te sentís como te sentís, por qué estás triste o por qué no tenés ganas de hacer algo y, en vez de buscar el conocimiento y gestión de tus emociones, perdés el control de lo que hacés y, por lo general, te distraes con actividades que no te hagan pensar ni reflexionar.
5 – Identificás que siempre te pasa lo mismo y no sabes por qué.
Esto significa tanto en las relaciones personales como en las situaciones de la vida. Y es que la mayoría de las veces nos encontramos en un círculo vicioso y con patrones de conducta que no nos cuestionamos. Entonces, repetimos una y otra vez las mismas situaciones. El famoso “siempre termino saliendo con personas (insertar aquí la característica que corresponda).
¿Por qué es importante autoconocerse?
Autoconocerse es el primer paso para amarse a una misma. Poder desarrollar el famoso amor propio. También es el primer paso para valorarnos, para creer que nos merecemos que nos pasen cosas buenas y tener una autoestima fortalecida. Además, sirve para cambiar algo de nuestras vidas que no nos convence, que no nos gusta.
Es importante el autoconocimiento para entenderse a una misma. Entender tus pensamientos, tus emociones, tus acciones y reacciones. Aquello que te hace bien, aquello que te gusta, aquello que te preocupa, lo que no te gusta. Lo que deseas para un futuro, lo que querés cambiar en tu presente para proyectar tu futuro.
El autoconocimiento nos ayuda a regular nuestras emociones, relacionarnos con las demás personas y conseguir nuestros objetivos. En determinados momentos de nuestra vida nos encontraremos con dudas sobre cómo seguir. Cuanto más te conocés, más metas realistas podrás establecer y sabrás identificar qué camino estás.
Otro aspecto importante del autoconocimiento es que podés encontrarle el sentido a tu vida. El sentido refiriéndose a aquella pasión, aquella huella que queremos dejar en el mundo. Podemos saber lo que queremos en la vida.
No conocerse a una misma puede llevar a sentir un vacío enorme que nos hace sentir malestar emocional. Nos puede hacer sentirnos perdidas, que estamos en piloto automático haciendo lo que creemos que las demás personas quieren que hagamos, haciendo cosas que ni siquiera disfrutamos. Ese vacío que sentimos nos conduce a crisis existenciales y pedirá que lo llenemos. ¿Y con qué lo vas a llenar si no te conocés? Con excesos de comida, de compras, de sustancias, de series o películas, uso del celular, redes sociales, exceso de trabajo, cualquier cosa en lugar de conectarte con vos misma.
Autoconocimiento nos permite auto respetarnos. Tener claro cuáles son nuestras limitaciones y posibilidades para conocer cuáles son nuestras necesidades y respetarlas. El auto respeto también permite que pongas límites a las demás personas.
Para poder amar a una persona, primero tenés que conocerla. Por eso primero está el autoconocimiento y después el amor propio.
Conocé los 10 beneficios del autoconocimiento
Cómo comenzar el camino del autoconocimiento
Comenzar el camino del autoconocimiento y observar que durante algún tiempo hemos sido una persona muy diferente a la que creíamos o queríamos, suele ser difícil. El comienzo del camino para conocerse a una misma, en mi experiencia, fue como entrar una biblioteca enorme, con un montón de pasillos y toda llena de polvo y suciedad. Y así empezó un gran trabajo de primero reconocer todo lo que había, para después limpiar la suciedad y acomodar la biblioteca a mi gusto. También es importante mencionar que este no es un trabajo de una sola vez y que es posible que durante la vida tengas que limpiar, ordenar y decorar la biblioteca. Son esos momentos en los que se recomienda poner pausa y reflexionar.
Ejercicios de escritura para conocerte a través de lo que escribís
Conociéndote
Un viaje hacia el autoconocimiento y crecimiento personal
Libro de ejercicios de escritura terapéutica
Quienes somos en realidad
Revisar nuestras creencias. Y entender por qué pienso como pienso, dónde y cómo lo aprendí. Quién me dijo que tengo que hacer las cosas así o pensar de determinada manera. Para comenzar con esta tarea, te sugiero dos ejercicios:
1 – Respondé la pregunta: ¿Hay algo en mi interior que me haga sentir que ese pensamiento, esa creencia no va conmigo, no me hace sentir bien?
2 – Escribí una lista de todas esas creencias y pensamientos que tenés sobre vos misma. Y al lado poné quién te hizo tener esa creencia y si estás de acuerdo.
Un ejemplo basado en mi experiencia.
Ejercicio 1: La creencia que para que me acepten como persona tengo que ser perfecta y no equivocarme nunca.
Ejercicio 2:
La creencia que para que me acepten como persona tengo que ser perfecta y no equivocarme nunca. Me la enseñó mi padre porque siempre me exigió que me saque 10 en la escuela. No, no estoy de acuerdo con tener que ser perfecta y no poder equivocarme para que me acepten y quieran por quien soy.
Quien no me permito ser
En el camino del autoconocimiento podemos observar esos mandatos y prohibiciones que adquirimos durante nuestra vida y que son deseos que no podemos cumplir a causa de esas prohibiciones. Muchas personas hacen cosas que realmente no quieren hacer y eso les provoca malestar emocional como la angustia.
El autoconocimiento es la búsqueda del equilibrio y de coherencia entre lo que digo, pienso, siento y hago.
¿Te cuestionaste alguna vez por qué sos como sos? Como mencioné más arriba, una de las primeras creencias que me cuestioné fue la de ser perfecta, tener las mejores notas, ser la nena buena y educada que todo dice que sí, que siempre está disponible, que siempre tiene que tener una sonrisa en el rostro sin importar lo que verdaderamente sienta. Todas esas partes de mi que eran creencias e imposiciones de otras personas, una por una las fui cuestionando y buscando estrategias para modificar esos patrones.
Quien sí quiero ser
Después de saber lo que no quiero, viene la parte de lo que SÍ quiero. Como les mencioné más arriba, es importante soportar el momento en que descubrís que en verdad no sos la persona que pensabas o creías y que, además, es diferente a lo que realmente querés ser.
Pero una vez que pasas ese momento, viene la parte de cosechar los frutos que sembraste y elegir lo que te gusta, lo que vos querés para tu vida. No siempre debemos saber quién somos ni tampoco la idea es que todo el tiempo te estés cuestionando. Con el tiempo, vas a identificar cuándo es momento de hacer una nueva pausa para reflexionar. El autoconocimiento no es solo un camino, son varios.
Herramientas del autoconocimiento
Existen varias herramientas que podés utilizar para conocerte a vos misma. Las que voy a compartir son las que conozco y pongo en práctica. Existen más, seguramente, así que te invito a que explores otras herramientas de autoconocimiento que te ayuden en el proceso.
Escribir un diario personal
Por algo el nombre del blog es “me hace bien escribir” y mi podcast se llama “diario no íntimo”, ¿no?
Para mi la escritura es una herramienta super poderosa con el cual conectar con una misma.
Tener un diario personal en el cual escribir y registrar tus emociones, tus pensamientos, tus deseos, tus miedos te permitirá conocerte a vos misma e, incluso, proyectar el futuro que querés y establecer metas para alcanzar tus objetivos de vida.
En esta publicación escribí sobre qué es un diario personal, los diferentes tipos de diarios personales que existen.
Realizar ejercicios de escritura creativa y terapéutica
Los ejercicios de escritura creativa y terapéutica son disparadores que nos ayudan a reflexionar sobre nosotras mismas y conectar con nuestro interior. Tener un diario personal o escribir las páginas matutinas los usamos para ir registrando lo que pasa en el día y, en cambio, los ejercicios son desafíos para entrar un poco más en nuestro mundo interior y alumbrar esas cosas que tenemos ocultas. Siguiendo con la metáfora de la biblioteca, sería como ir hacia los pasillos más alejados de la puerta y en los que no hay ninguna ventana o haya cortinas que tapen el ingreso de la luz solar.
Desde la página 29 (aprender a sentir todas las emociones), comparto un ejercicio de escritura terapéutica al final del episodio. Son una serie de ejercicios que denominé como “Preguntas para conocerte”. Y son justamente eso, preguntas y ejercicios que tienen el objetivo de ser disparadores para que reflexiones sobre diversas cuestiones que en el día a día no tenemos presente y que nos ayuda a conocernos.
Momentos de reflexión y meditación
En mi día a día son importantes esos momentos de reflexión. La mayoría de los días ese momento se produce cuando escribo las páginas matutinas o dedico tiempo para escribir en mi diario terapéutico. Pero también existen otros momentos en los que me permito conectar con mi lado artístico y creativo. Cuando dibujo zentagles o pinto con puntillismo. Son actividades que me permiten realizar una meditación activa.
También practico la meditación, también conocida como mindfulness. Depende del día, 5 o 10 minutos en los que cierro los ojos y respiro mientras veo pasar mis pensamientos como si fuera nubes. El mindfulness me ayudó a dejar de tenerle miedo a mis pensamientos y a dejar de darle tanta importancia. Estoy hablando de los pensamientos catastróficos e intrusivos que me atormentaban día y noche. Hoy en día, cuando siento que mi mente va a mil por hora, antes de llegar al colapso y agotamiento mental, me tomo unos 5 o 10 minutos para estar en silencio y solo concentrarme en mi respiración.
Ir a terapia
Se que ir a terapia es un privilegio y que estamos muy lejos de tener un buen plan de salud mental al alcance de todas las personas. También hay un concepto de que cuando vas a terapia, el psicólogo o psicóloga te tienen que ayudar sí o sí. Y esto no es así. Es tarea nuestra encontrar un terapeuta con el cual sentirnos seguras y cómodas. No es que al primero que elijo, ya está, tiene que ser bueno y ayudarme. No, es clave entender que podés no sentirte bien con tu psicólogo y que podés cambiar de terapeuta las veces que necesites hasta encontrarte con aquella profesional que te de seguridad y confianza y tenga la forma de atender que te gusta y necesitás.
En la actualidad existe la posibilidad de tener terapia online a través de videollamadas e incluso por chat y mensajes. Lo veo como una ventaja porque, habiendo vivido en pueblos donde había poco profesionales de salud mental, es normal que sientas desconfianza o verguenza de atenderte con personas que después cruzás por la calle o que, incluso, conocen a tu familia. Así que con la terapia online podés comenzar terapia con una psicóloga que vive en otro lugar.
¿Estás por comenzar el camino del autoconocimiento?
Si estás comenzando en el camino del autoconocimiento, me alegro por vos y quiero decirte ¡ánimo! Ánimo que no estás sola o solo. Que puede parecer abrumador al principio y que sientas que te metiste en un laberinto sin salida pero que, con tiempo, paciencia y sobre todo compasión, transitar el camino del autoconocimiento da mucha satisfacción.
Cuando empecé a transitarlo, una de las cosas que me di cuenta, es que no sabía cuál era el sentido de mi vida. Es decir, qué le daba sentido a mi paso por este mundo. Después de escribir hojas y hojas en mi diario terapéutico y de varias sesiones de terapia, me encontré con diferentes herramientas que me permitieron conectar con aquello que me hace bien y planear mi vida en relación a eso que me hace sentir bien.
Y todo esas herramientas las compartí en estos dos e-books que podés descargarte gratis:
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