Lo que propongo es que hagas una lista de todas esas cosas que querés hacer y que siempre postergás, procrastinás. Y al lado, escribí cuál es la acción, qué es lo que te da placer inmediato y que siempre preferís hacer antes que ponerte a hacer alguna de las tareas de la primera lista.
Puede ser, no se, quiero aprender inglés pero como tengo miedo de que se burlen porque no se pronunciar o tengo miedo a no poder aprender al ritmo del resto, cada vez que estoy por inscribirme, termino viendo una serie en Netflix o comprando medio kilo de helado (o ambos).
Y ahora hacé de cuenta que viene alguien, alguien que conocés y a quien querés, y te cuenta que quiere aprender inglés pero no lo hace porque tiene miedo a no saber pronunciar o no aprender tan rápido como el resto de las personas. ¿Qué le dirías? ¿Qué te parece lo que está diciendo? ¿Tiene sentido? ¿Le dirías que tiene razón y que entonces no aprenda inglés? Intentá racionalizar lo más que puedas cada uno de los motivos por los cuales postergas las actividades que querés hacer para ser consciente del mecanismo en el que estás como atrapada, para empezar a dejar de estarlo.
Este ejercició lo compartí en el episodio del podcast «Página 41 – Entendiendo el autoboicot«.
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